8/FEB/2014 Por Inter News Service- Un grupo de personas marchó hoy desde la avenida Hostos, esquina PR-2, hasta los predios de Plaza del Caribe, en Ponce, para protestar en contra de la tala de 302 árboles en el lugar.
“Estamos pidiendo que se revoque el permiso para que no corten más árboles”, dijo a la agencia Inter News Service (INS) Martín González Vázquez, portavoz del Comité Amigos de los Árboles (Coamar).
Los manifestantes llevaron un ataúd de madera con flores, ramas y un maniquí en su interior, en alusión a que “simbólicamente vamos enterrando a los Fonalledas y a la vez enterrando la masacre ambiental que ha habido aquí”.
“Los Fonalledas han destruido y va a seguir destruyendo árboles, la masacre ambiental va a seguir destruyendo”, agregó en referencia a la familia propietaria del centro comercial.
La tala de árboles en Plaza del Caribe se inició el 18 de enero y generó una lluvia de reclamos, no solo porque no fue anunciada, sino porque se hizo de noche, en fines de semana.
González Vázquez expuso a la agencia INS que “los planos los hicieron en Estados Unidos sin tomar en consideración la vegetación”, mientras que con otro plan de construcción solo tendrían que cortar 17 árboles.
“Tampoco estaría a favor de 17 árboles, pero no es lo mismo 17 a que se afecten 302 árboles. Esto no tiene sentido, es una estupidez”, declaró al indicar que ya se cortaron árboles como ficus, palmas, úcares y caobas.
Según la organización, los árboles talados fueron sembrados en 1992 como parte de la mitigación del daño ambiental que provocó la construcción del centro comercial Plaza del Caribe. Un grupo de personas marchó hoy desde la avenida Hostos, esquina PR-2, hasta los predios de Plaza del Caribe, en Ponce, para protestar en contra de la tala de 302 árboles en el lugar.
“Estamos pidiendo que se revoque el permiso para que no corten más árboles”, dijo a la agencia Inter News Service (INS) Martín González Vázquez, portavoz del Comité Amigos de los Árboles (Coamar).
Los manifestantes llevaron un ataúd de madera con flores, ramas y un maniquí en su interior, en alusión a que “simbólicamente vamos enterrando a los Fonalledas y a la vez enterrando la masacre ambiental que ha habido aquí”.
“Los Fonalledas han destruido y va a seguir destruyendo árboles, la masacre ambiental va a seguir destruyendo”, agregó en referencia a la familia propietaria del centro comercial.
La tala de árboles en Plaza del Caribe se inició el 18 de enero y generó una lluvia de reclamos, no solo porque no fue anunciada, sino porque se hizo de noche, en fines de semana.
González Vázquez expuso a la agencia INS que “los planos los hicieron en Estados Unidos sin tomar en consideración la vegetación”, mientras que con otro plan de construcción solo tendrían que cortar 17 árboles.
“Tampoco estaría a favor de 17 árboles, pero no es lo mismo 17 a que se afecten 302 árboles. Esto no tiene sentido, es una estupidez”, declaró al indicar que ya se cortaron árboles como ficus, palmas, úcares y caobas.
Según la organización, los árboles talados fueron sembrados en 1992 como parte de la mitigación del daño ambiental que provocó la construcción del centro comercial Plaza del Caribe.
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