La administración municipal, además, incumplió con las disposiciones del Convenio de Delegación de Competencias del Departamento de Recursos Naturales y Ambientales (DRNA), firmado entre ambas partes el 30 de noviembre de 1992 y cobijado en la Ley de Municipios Autónomos.
Ambas conclusiones están recogidas en un informe técnico preparado por biólogos adscritos al DRNA, luego que realizaran una investigación e inspección de campo ante las denuncias de grupos comunitarios referentes a que la tala de árboles en Plaza del Caribe se llevó a cabo irregularmente.
A grandes rasgos, el informe concluye que el Municipio no consideró las recomendaciones de su empleada especializada y autorizada para otorgar o denegar permisos, Celsa Rodríguez Fernández, quien es bióloga y está certificada por el DRNA como profesional de siembra y forestación.
“Las recomendaciones que ofreció la bióloga Celsa Rodríguez Fernández fueron muy acertadas y debieron ser tomadas en consideración en su totalidad”, reza el informe, en el que se explica que el incumplimiento del Municipio estriba en que permitió criterios “más laxos” a las normas, directrices y política pública del DRNA.
A estos efectos, la secretaria del DRNA, Carmen Guerrero, le envió el pasado lunes una carta a la alcaldesa de Ponce, María Meléndez, solicitándole que en un plazo no mayor de 15 días presente “un plan para subsanar las acciones tomadas contrarias a las disposiciones legales antes referidas o exponer cualesquiera circunstancias especiales que justifiquen su posición”.
Guerrero le advirtió a Meléndez que de no cumplir con lo antes dicho, el DRNA iniciará un “Procedimiento de Conciliación” ante la Oficina del Comisionado de Asuntos Municipales.
De inmediato, Meléndez se cantó ayer “sorprendida” y rechazó “de plano” los señalamientos del DRNA. Dijo, además, que el ayuntamiento se propone defender “en todos los foros necesarios” la autonomía municipal.
“Estoy sorprendida con la carta remitida por la secretaria del DRNA. Más aún, fue a través de la prensa que tuvimos conocimiento en primera instancia de dicha comunicación. La carta del DRNA está siendo evaluada por nuestros asesores legales, conjuntamente con la Oficina de Permisos, para someter formalmente la contestación del municipio”, dijo la alcaldesa.
Mientras, el director de la Oficina de Permisos, Félix Camacho, indicó que ni la carta, ni el informe del DRNA establecen qué disposiciones de la Ley de Bosques supuestamente se violentaron, ni tampoco hacen referencia a qué criterios implementados fueron “más laxos”. Añadió que “la mayoría” de las recomendaciones de Rodríguez Fernández “fueron incorporadas”.
Por su parte, Lorraine Vissepó, portavoz de la administración de Plaza del Caribe, sostuvo que el informe del DRNA confirma que “todos los trabajos cumplen cabalmente” con el reglamento vigente en el Municipio Autónomo de Ponce. “Los parámetros de siembra y mitigación establecidos en el reglamento son diferentes a los parámetros vigentes en otros municipios no autónomos, que se rigen por lo establecido en el reglamento de la Oficina de Gerencia de Permisos. Plaza del Caribe cumple con todos los requisitos que debe cumplir cualquier proyecto o desarrollo que se proponga construir en la ciudad de Ponce”, dijo Vissepó.
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